Tras jugar un certamen de altísimo nivel, Alemania se consagró por cuarta vez en su historia como campeón de la Copa Mundial de la FIFA™ gracias a la victoria sobre Argentina por 1-0 en tiempo suplementario. El partido se jugó el domingo 13 de julio en el Estadio Maracaná, de Río de Janeiro. Mario Goetze fue el autor del gol alemán en el segundo tiempo del alargue.
Alemania inició la final con una mala noticia: Sami Khedira se lesionó en el calentamiento previo y su lugar lo tomó Christoph Kramer. Pese a la sensible baja, los alemanes lograron dominar la mitad de la cancha en base a toque y circulación, con Bastian Schweinsteiger como director de orquesta. Argentina que había mostrado una gran capacidad de quite en la medular desde los cuartos de final contra Bélgica, no tuvo en Lucas Biglia y Javier Mascherano los diques esperados. Tuvieron que ser los laterales, en último caso los centrales, los que fueron cerrando grifos.